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Cruceros por el

Báltico

Cruceros con Guía Asistente y Excursiones Opcionales en Español

Lo mejor del Báltico

HISTORIA

Historia

El Mar Báltico ha sido un cruce de culturas y rutas comerciales cruciales durante siglos. Rodeado por países como Suecia, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia y Alemania, su historia está intrínsecamente ligada a los intercambios y conflictos que han definido Europa.


Durante la época vikinga, el Báltico se convirtió en una ruta clave para los comerciantes y exploradores nórdicos, que establecieron conexiones entre el norte y el este de Europa. Posteriormente, la Liga Hanseática, una poderosa alianza de ciudades comerciales en los siglos XIII al XVII, utilizó las aguas del Báltico para monopolizar el comercio de bienes como la madera, el grano y el pescado, fortaleciendo económicamente a ciudades como Tallin, Riga y Gdansk.


El mar también ha sido escenario de numerosos conflictos, desde las guerras medievales hasta las disputas territoriales modernas. Durante la Guerra Fría, su ubicación estratégica lo convirtió en una línea divisoria entre el bloque oriental y occidental.


A pesar de este turbulento pasado, el Mar Báltico es hoy un símbolo de la rica herencia cultural de la región, conocido por sus impresionantes paisajes naturales, sus ciudades medievales bien conservadas y su papel en la revitalización de las relaciones comerciales y culturales en Europa.

COMIDA

Comida

La comida en los países bálticos refleja su historia y entorno geográfico, con influencias nórdicas, rusas y alemanas. 


En Suecia y Finlandia, el pescado es protagonista, especialmente el salmón y arenque, acompañados de papas y pan de centeno. 
Estonia, Letonia y Lituania destacan por platos reconfortantes como sopas de remolacha, pan negro, y carne de cerdo. 
En Polonia, la gastronomía ofrece pierogi (empanadillas) y bigos (estofado de carne y col).

Alemania aporta salchichas y cervezas artesanales. 


La región comparte una pasión por ingredientes frescos, conservas y platos tradicionales con sabores auténticos.

LOS PUERTOS MÁS VISITADOS

Los puertos más visitados

En un crucero por el Báltico, puedes explorar destinos fascinantes como: 


- Estocolmo, famosa por su casco antiguo medieval y pintorescas islas del archipiélago.
- Helsinki, una ciudad vibrante con una mezcla única de diseño moderno y naturaleza.
- Tallin, con su impresionante ciudad amurallada y encanto medieval.
- Copenhague, famosa por la estatua de La Sirenita y su ambiente acogedor.
- Berlín, con su historia moderna, la Puerta de Brandeburgo y vestigios del Muro de Berlín, ofrece una mezcla única de cultura, arte y monumentos históricos.


Estos puertos ofrecen una mezcla de cultura, historia y paisajes impresionantes.

Clima

Clima

El clima del Báltico es fresco y variable, con veranos suaves y temperaturas de 15-25°C, mientras que los inviernos son fríos y ventosos. Se recomienda llevar capas de ropa, impermeables y zapatos cómodos. Las mejores épocas para visitar son primavera y verano, cuando el clima es más agradable.

moneda

Moneda

En la región del Báltico, las monedas varían según el país:


Suecia y Dinamarca usan la corona.

Estonia, Letonia, Lituania, Finlandia y Alemania usan el euro.


Aunque el efectivo es aceptado, las tarjetas de crédito y débito (Visa, MasterCard) son las formas de pago más comunes. Se recomienda llevar algo de efectivo para pequeñas compras en mercados locales o áreas rurales.

Curiosidades

Curiosidades​

- Estocolmo y su ciudad flotante: Estocolmo está construida sobre 14 islas conectadas por más de 50 puentes, lo que le otorga un ambiente único. Se le llama "la Venecia del Norte" por su conexión con el agua y sus impresionantes vistas del archipiélago.


- Copenhague y Christiania: En Copenhague se encuentra Freetown Christiania, una comunidad autónoma dentro de la ciudad que se rige por sus propias reglas. Es conocida por su arte urbano, estilo de vida alternativo y ambiente bohemio, atrayendo a muchos visitantes curiosos.


- Tallin, la ciudad medieval mejor conservada: Tallin, la capital de Estonia, posee uno de los cascos antiguos medievales mejor conservados de Europa. Su arquitectura gótica, con torres y calles adoquinadas, transporta a los turistas directamente al pasado.


- La línea de metro de Berlín bajo el agua: En Berlín, una de las líneas de metro (U7) pasa por debajo del río Spree, un hecho que muchos turistas desconocen. Es un dato curioso de la extensa y eficiente red de transporte de la ciudad.


- Helsinki y la fortaleza marina de Suomenlinna: La fortaleza de Suomenlinna, construida en seis islas, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es una fascinante mezcla de naturaleza y arquitectura militar, accesible desde Helsinki en un breve viaje en ferry.